No hagas sombra a nadie, desparece y así los iluminarás…


Has venido a ser el milagro de otro y ese otro tiene también su propio milagro, pero para lograrlo debes pensar en que persona te tienes que convertir para realizar dicho milagro?

Para convertirte en ese alguien  debes aprender a conmover…


Y “conmover” va significar para ti moverte libre y útil dentro de un conjunto, saber estar más allá de mediar, pues cuando ya has puesto remedio en tu vida es cuando empiezas a ser un guía, un líder, un referente, un innovador, y esto no va a gustar a tu alrededor, por eso será hora de “moverte” para que no te tomen por un alborotador sino para que más bien aprendas ahora sí a conmover de verdad a los demás, y para ello debes primero aprender a “desaparecer”… 


“Desaparecer” es dejar que tu “esencia” se manifieste en el tiempo, esto se hace con la voz del silencio y con su sonido, “el

sonido del silencio” que no es más que aquello que ya transmites simplemente por ser tú, por mostrarte, por estar en “presencia”. 


El silencio es una fuerza que todo lo puede. Es cuando vences a los demás con mérito, porque entonces en los vencidos no hay dolor. (Recuerda, que no hay mérito en los vencedores, si en los vencidos hay dolor…) 


Cuando vences a la vida sin esfuerzo tú belleza interior reluce, se manifiesta, es tu esencia impregnando todo a tu alrededor y es este preciso momento, el momento de retirarse, el momento de la “despedida”. 

No confundas esto con abandonarlo todo, sino más bien, es echarse a un lado, desaparecer de la presencia para no hacer sombra a los demás para dejar pasar su luz, su “esencia”. 


Siempre que estes en la presencia por mucho que lo hagas, con la voz y desde el sonido del silencio, a alguien o a algo harás sombra y así será más difícil obrar tu milagro. En resumen déjalos ser, inspírales con tus actos, no hables, actúa, manifiéstate según tu voz interior eso te hará libre y seguro de ti mismo, y entonces deja esa huella y despídete, te darás cuenta que no te seguirán a ti, sino que seguirán tus pasos y entonces les habrás inspirado, serán libres y renacerán y tú habrás sembrado en su campo y serás su leyenda y ese será tu legado, por lo que te recordarán, aquello por lo que perdurarás en el tiempo y más allá… 


Recuerda que tú esencia es aquello que dejará tu huella de amor en el corazón de los demás y hará que se te recuerde, que te conviertas en leyenda y que aquello que hiciste perdure y traspase los vértices del tiempo…

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