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Mostrando entradas de febrero, 2015

Jesús y los Esenios, toda una vida y toda una enseñanza...

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Hace mucho más de dos mil años los judíos más transgresores de la Galilea comenzaron a promover una forma de vida más liberal, más igualitaria y más fraterna que aquella que habían aprendido del antiguo testamento y las enseñanzas de Moisés. Fueron conocidos en su época como Esenios, vivían en comunidad y su vida estaba basada en la búsqueda de un profundo conocimiento interior para trascender la personalidad egoica y para lograr tener una vida consciente desde el espíritu. Eran conocidos no sólo por su especial visión de la realidad y su mística, sino también por su perfecta organización y jerarquía basada en los grados de evolución de la consciencia. Fueron grandes agricultores, así como grandes promotores de la curación física y psíquica. Su mística, su sabiduría y su esoterismo les habían sido transmitidos desde las más antiguas civilizaciones. En estas comunidades nació, creció y se formó un ser especial cuyo recuerdo formará siempre parte de la historia de la humanidad, Jesús de

Los Inuit, el pueblo del frío...

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Los Inuit de Groenlandia, Alaska y Canadá suelen decir que para vivir con armonía deberías ser capaz de atravesar el páramo gélido, el gran lago helado, sin crear ni una fisura en él, observando todo a tu alrededor, con calma y con una ligera parsimonia que te permita tomar decisiones más sensatas, más honestas y equilibradas, que permitan liberarte del camino del ensayo y error, y de caer siempre en la misma piedra. Así cuando llegues al centro del páramo gélido sólo con un pequeño agujero, un mal menor, podrás disfrutar de la pesca. Ellos saben que la personalidad se enfría por las circunstancias de la vida y por esto envejecemos más rápido, porque al enfriarnos perdemos no sólo la esperanza sino algo más importante, la ilusión. Pero recuerda que el espíritu que insufla tu vida, el generador de tu impulso vital es cálido, y eternamente joven. La rutina gélida del inuit hace que este no le otorgue poder o importancia a la búsqueda de los conocimientos a cerca de la vida, sólo se centr

Conocerse para olvidarse...

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Se dice que el hábito no hace al monje. El monje en su búsqueda espiritual aprende el desapego, y esto le permite crecer conociéndose y olvidándose a la vez, cosa que lo convierte en un sabio. Sin embargo la palabra hábito nos habla de la costumbre y del uso. Estamos acostumbrados a nuestra realidad hasta tal punto que aceptamos a la primera la forma en como vemos, entendemos y hacemos las cosas, sin más cuestionamiento; pensando sólo en nosotros mismos. Pero para entender e interpretar la realidad primero hemos de conocernos y después olvidarnos. La etapa de la madurez es el momento donde cada uno comienza a conocerse, pero también es el momento donde ciertos hábitos cambian, ó desearíamos que cambiasen, ó quisiéramos dejarlos en el olvido.  En esta etapa se acentúa la característica principal y base de nuestra existencia la constante universal basada en la creación, la renovación y la conservación de la vida. Aun llenos de vitalidad deseamos seguir creando libremente nuestras vidas y

La Medicina, mas sabiduría nativa...

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En la sabiduría nativa La Medicina, tiene un significado profundo basado en un momento de cambio y un tiempo de perfeccionamiento de dicho cambio. La medicina que el gran espíritu entrego a los nativos es la expresión de vida natural de todo el planeta. Nosotros, hoy por hoy, desconocemos dicha conexión natural. Todo lo que vivimos es fruto de un pensamiento en la mente, este primer pensamiento en todas las acciones de la vida está inducido a promover cambios a mejor, a verlos florecer y a mantenerlos, siempre y cuando los pensamientos estén unidos a una visión colectiva de la realidad. Cada vez que esto ocurre ese pensamiento en acción es medicinal produce una sanación del entorno.  Por lo tanto la primera de las medicinas es la pureza de los pensamientos, que sean tan puros como la nieve al caer en el invierno. Nada de este mundo, ni las plantas, ni los árboles frutales, ni los venados, o cualquier otro animal piensa en su propio bien sino en un bien común, la conciencia grupal de la

Sabiduría nativa, la empatía...

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Al observar ciertas costumbres de los antiguos pueblos nativos del planeta, descubres que existen formas de hacer muy parecidas entre ellas, como si la consciencia grupal de cada pueblo o tribu independientemente de la distancia y el tiempo, estuviese conectada y supieran los unos acerca de los otros. En la ciencia este término es descrito como masa crítica.   Estas costumbres están basadas por y para la comunidad, evidentemente debido a los instintos de supervivencia. Por lo que siempre se buscará el bien mayor y común. En cuanto a las decisiones estas son tomadas por el más sabio, generalmente el más anciano, porque ha vivido más y tiene más experiencia pero si existe algún tema donde alguien sepa más, entonces este será el que decida. La propiedad privada prácticamente no existe, la comida recolectada o cazada se comparte. Todo se hace desde la grupalidad. De este modo se consigue un alto grado de empatía basado en algo muy importante que deberíamos tener siempre presente a la hora