Jefe Nativo Cuervo Loco, Antes de que todo tuviera precio...

Enseñanzas del Gran Jefe Sioux, Cuervo Loco:
El tiempo es la mejor cura para todas las heridas cuando los pensamientos no son medicinales, y si te dejaron heridas seguramente tus pensamientos están ó han estado enfermos. Los pensamientos enfermos están basados en la falsa creencia del hombre blanco ante la posesión material. Un día nosotros conocimos al hombre blanco, él nos enseño que la tierra, nuestra tierra, no nos pertenecía como herencia del Gran Espíritu y de nuestra Gran Madre, sino que se podía dividir y comprar con oro, que tenía un precio y que todo en la vida costaba algo de ese oro. 

Es aquí cuando el hombre blanco manipuló la esencia del pensamiento natural, medicinal y se entregó a la vida a través del intercambio egoísta, sometiendo bajo su dominación a todos aquellos que se opusieran a su tan fastuosa y recargada verdad. 

Desterró tribus, cambió el curso de los ríos, mato animales por despecho, y quemó toda la vida que nuestra Gran Madre nos otorgó a nosotros sus hijos. Y es aquí cuando el hombre blanco adoleció y enfermó de su propia actuación y al negar el fruto de la verdadera vida, creo un falso fruto que hoy en día ni puedes comer, ni te llena, ni te alimenta. Le puso precio a todas las cosas, cambiaron entonces los valores, y sobretodo cambió el valor de lo que verdaderamente es importante y necesario en la vida y al tener otro orden de prioridades, evidentemente de carácter egoísta, circundó y ahorcó toda su vida. La misma vida que hoy aborreces, rechazas y niegas casi constantemente. 

El hombre blanco creó a un falso Dios que aún sigue adorando. Enfermando así su espíritu y su presencia en la tierra, su alma y su pensamiento también enfermaron. Y desde este punto sus acciones en mayor medida han sido creadas por las necesidades diarias de su realidad presente y desde entonces juega con fuego, con el fuego que contienen las leyes del libre albedrío y el karma.

Un pensamiento enfermo es aquel pensamiento que se construye en función de una preocupación, que en mayor medida es fruto de una necesidad. Las necesidades diarias sostienen las cosas importantes de la vida pero así como los órganos del cuerpo tienen un propósito mayor, el propósito de cubrir dichas necesidades diarias es permitir experimentar o descubrir lo que es verdaderamente importante para cada uno. 

Construyes tu vida pensando en asegurar la casa, el trabajo, la familia, o la pareja porque crees que así podrás ser feliz ó tendrás tiempo para realizarte, pero realmente están pensando y creando desde el miedo a la falta de alguna o de todas ellas y entonces es cuando estás enfermando, porque tus pensamientos basados en el precio, en el oro, son ya pensamientos nacidos enfermos.

Los pensamientos medicinales son aquellos que no pretenden dar nada por seguro, que no pretenden hacerte carcelero para que hagas a todos y a todo de tus prisioneros. Pues de este modo haces prisioneras, y atrapas a todas tus relaciones cuando tienes pensamientos enfermos. 
Los pensamiento medicinales no tratan de sanar ninguna de tus relaciones sino que van más allá, están destinados a crear la vida desde la liberación de todas tus ataduras, destruyéndolas, haciendo de cada uno un espíritu libre, sin embargo tu gran enemigo, el ego, siempre se revela, te ata a tus miedos para poder sobrevivir, para no perder la batalla.

Como ves la decisión de luchar y fracasar o la decisión de ser libre está en tu interior, ¿Te estarás preguntando en que parte de tu interior la albergas? Ciertamente en el punto donde se crea cualquier medicina, en lo que nosotros llamamos la bolsa o saco medicinal que tu conoces hoy día como la amígdala cerebral. Una pequeña bolsa que contiene tu inteligencia emocional, aquella donde se filtran las emociones para crear recuerdos o memoria y que balancea el karma y la presunción de tu libre albedrío en la vida. 

Es debido a esta amígdala que tu pensamiento puede liberarte o hacerte prisionero de tu vida. Reside justo detrás de la glándula pineal y está llena de neuronas que activan dicha glándula que es la que emite de forma refleja los pensamiento del Gran Espíritu, de Wakan Tanka, a través de tus pensamientos que deberían ser medicinales.

El coeficiente emocional de cada ser humano reside en esta amígdala cerebral y está creado para dotarte de madurez y maestría, a través de la expresión de tu espíritu en los actos de tu vida, es decir está destinado a iluminarte, a hacerte consciente de tu verdadera identidad. Cuando la amígdala se llena de emociones por lo vivido está emite una descarga de información hacia la glándula pineal que intenta comprender lo ocurrido, sí el ser humano tiene mayores comprensiones ó madurez, la amígdala se libera de información emotiva, sus nuevas acciones son activas y vivificadoras, ordenan la realidad, contribuyen a la tribu, al colectivo y tienen un propósito divino, están en el Dharma, en la utilidad de la vida.  

De lo contrario sí el ser humano no tiene comprensiones y entra en cólera las emociones ó informaciones regresan de nuevo a la amígdala cerebral y el pensamiento desde la glándula pineal es totalmente reactivo disminuyendo su función física básica de crear las hormonas hacia el sistema endocrino pudiendo así enfermar tu cuerpo. 

También tu glándula pineal mantiene tu temperatura corporal que es un indicador de tu estado de vibración energética, si está se mantiene u oscila a la baja la amígdala está en mayor medida liberada, purificada, sin embargo cuando tu temperatura corporal aumenta la amígdala se encuentra saturada, a consecuencia de esto tu glándula pineal se calienta produciendo el aumento de la temperatura corporal pudiendo sufrir incluso fiebre seguida de sudación. La información se está entonces liberando por los poros de tu piel, tu sistema límbico no esta procesando y pasa actuar tu cerebro reptil e instintivo, estás entonces en un estado de alerta, es decir de preocupación, en un estado de pensamientos enfermos.

La limpieza y purificación de esta amígdala, así como la quietud de las emociones fruto de la paz interior y la madurez por lo vivido son indicadores de un cuerpo físico sano con pocas oportunidades para crear un dolor ó enfermedad; difícil pues de enfermar, sin embargo la paz se consigue cuando se está en el propósito de la vida, cuando uno se hace útil a su tribu y entonces su corazón, su vida, está al servicio de sus iguales, de sus hermanos. 

Cuando esta forma de honrar la vida es manifestada en el ser humano su alma dirige la realidad, es un instrumento del gran espíritu, de Wakan Tanka, es un hueso hueco y se convierte en sus ojos y sus manos y el gran creador, el gran espíritu se manifiesta a través de él, su amor es sanador y medicinal, su conocimiento emana de la sabiduría ancestral y no piensa, sólo intuye. 

El hombre medicina al purificar sus pensamientos crea la expansión de su corazón y no al revés, no se crea un ser de luz y de amor sin este proceso medicinal, que trata de crear una vibración superior al pensamiento egoísta, un pensamiento constructivo y de utilidad, cuyo propósito interior es abrir el corazón para crear lazos de unión nuevos, desde el amor, como único intercambio divino, y así liberarse de la esclavitud de ponerle valor, o precio a todo, de pagar por lo que ya te pertenece por herencia, por lo que siempre fue de todos y para todos.

Recuerda que sobre el manto de la Gran Madre Tierra hay cobijo y comida para todos, y sí estos dones de la Gran Madre son compartidos ella se siente gustosa de acrecentarlos, pero sí los repartes como un niño egoísta ella no te dará más, para evitar que aquellos que son sus hijos, a los que considera como iguales, entren en disputa y se separen.

Esto quiere decir que si decides con tu mente estarás influido por estos dos tipos de pensamiento que te explico, si intentas decidir por lo que ves simplemente aunque veas con amor será difícil que no te influya aquello que ves. Pero sí decides con tu corazón, tus juicios nunca serán severos pues tu corazón, tu alma y tu espíritu tienen en cuenta las cosas que han herido a la gente y lo que han tenido que hacer para permanecer sanos y vivos. 

Con el corazón piensas desde la honestidad, la certeza y la esperanza, y así se crea el Gran Círculo, que es la representación del corazón de Wakan Tanka, y así formando parte del círculo Wakan Tanka te reconoce como hijo suyo y él por ello te acepta y te permite todo.
...Y así como me lo enseñaron mis ancestros, hoy te lo he contado...



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